¿Cómo se debe trabajar la autoestima?

Autoestima

Podemos definir la autoestima como la seguridad y confianza que posee una persona de sí misma. Podemos entenderla como la autovaloración que se tiene de uno mismo a nivel general.

En psicología, la ciencia que estudia el comportamiento del ser humano se suele trabajar a menudo con constructos, los cuales se pueden describir como conceptos teóricos muy abstractos, y en ellos podemos englobar la autoestima, el temperamento, la independencia, la extraversión, el neuroticismo, etc. Todos estos constructos están presentes en las personas, definiendo su personalidad, y habiendo diferencias entre unas y otras personas.

Por lo general las personas que suelen tener una buena autoestima llevan una vida más gratificante, afrontan mejor las adversidades, encaran nuevos retos más a menudo, tienen relaciones sanas con los que le rodean, etc. Se puede decir que su actitud ante la vida en general es más recomendable.

Dentro de la autoestima, como concepto, podemos hablar también de otros aspectos muy relacionados y vinculados entre sí, como son el autoconcepto y la autoimagen. Esto es lo que pensamos de nosotros mismos en lo referente a los diferentes aspectos y la imagen física que tenemos de nosotros mismos. De manera que si pensamos cosas negativas por lo general acerca de nosotros y además le sumamos a esto que nuestro aspecto físico nos desagrada, probablemente esto esté indicando que nuestra autoestima sea baja.

La autoestima es muy importante, ya que es un indicador de la relación que mantenemos con nosotros mismos, nos dice como nos vemos y lo satisfechos que nos encontramos con nuestra vida en general. Marca como una especie de actitud, que se ve en las decisiones que tomamos y en la forma en la que afrontamos las diferentes situaciones.

¿Qué consecuencias puede tener una persona con autoestima baja?

Al tener la autoestima baja tendemos a compararnos con los demás y a hacer una comparativa con aquellas cosas con las que estamos en desventaja, por ejemplo, nos solemos comparar con alguien que posee un poder adquisitivo muy superior al nuestro. También se suele hacer una especie de filtraje de los aspectos más negativos nuestros, y así le damos más importancia a aquellas connotaciones malas de nosotros mismos.

La baja autoestima está muy relacionada con procesos depresivos, ya que implica una tendencia a no creerse tan capaz como otros y a valer menos que los demás, y estos sentimientos llevan inevitablemente a un estado de ánimo con alteraciones y tintes depresivos.

Las consecuencias y conductas que pueden provocar en la persona una pobre autoestima son muchas, y van desde niveles físicos a psíquicos, pero las más comunes son ansiedad, depresión, evitar plantearse o enfrentarse a nuevos proyectos, conductas de alimentación compulsivas, insomnio, problemas en sus relaciones tanto familiares como de amigos y de pareja, etc.

¿Cómo reconocer a una persona con baja autoestima?

Conocer e identificar a las personas con baja autoestima existentes en nuestro entorno, es bueno para poder ayudarles en todo lo que nos sea posible, y también, para poder estar prevenidos ante ellas, ya que muchas de las personas con estas características que no tienen interés en resolver el problema, acaban convirtiéndose en personas tóxicas, y al estar con ellas e intentar ayudarles hace que sea perjudicial y una pérdida de energía vital sin resultados.

Hay que decir que la autoestima como la mayoría de los aspectos que describen al ser humano, al nivel psicológico, no son hieráticos ni fijos, sino que se mueven dentro de un continúo dependiendo de varios factores.

Por ejemplo, es normal que cuando nos ocurre algo desagradable o negativo nos encontremos con bajo estado de ánimo, y necesitemos llorar y recuperarnos de alguna manera procesando lo ocurrido. Pero las personas con baja autoestima desarrollan este patrón ante todo tipo de situaciones, entrando en un círculo difícil de salir.

Por lo general si conoces a alguna persona con las siguientes características, es muy probable que sea una persona con baja autoestima.

Están continuamente quejándose, se rinden antes de empezar o antes de hacer cualquier intento de alcanzar un objetivo ya que se ven incapaces de lograr algo, terminan haciendo lo que los demás dicen por no confiar en su criterio ni en su razonamiento y pensar que las decisiones de los demás son mejores que las suyas, tienen muy en cuenta la opinión de los demás y son inseguros.

Por lo general suelen ser poco asertivos e introvertidos, no suelen encajar muy bien las críticas de los demás, no establecen límites de cara a su intimidad motivo por el cual suelen ser el blanco perfecto para manipuladores y controladores, apenas se valoran, culpan siempre a factores externos o a los demás de las cosas malas que les sucede ya que no se responsabilizan de la actitud que adoptan hacia ellos mismos, delegan en otros ciertas toma de decisiones por pensar que otros lo harán mejor que ellos, infravaloran sus logros y sobrevaloran sus fallos y errores,  en ocasiones pueden llegar a manifestar comportamientos agresivos  como forma de exteriorizar su irritabilidad debido a su negativa opinión de sí mismos, no suelen tomar la iniciativa en casi ningún aspecto, piensan que no van a saber solucionar problemas y evitan enfrentarse a ello, suelen ser muy pesimistas y no creen tener  recursos para alcanzar sus metas.

¿Qué hacer para desarrollar y tener una buena autoestima?

Acepta tus fallos y tus virtudes:

Todos los seres humanos nos componemos de cosas buenas y de cosas malas, cada uno de nosotros debemos aceptar ambas, y plantearnos si podemos hacer algo para poder cambiar aquellos rasgos que nos disgustan o que los demás nos han dicho en repetidas ocasiones que no son cómodos, y que les molestan, y con el resto lo único que podemos hacer es aceptarlos y convivir con ellos de la mejor manera posible.

Trabaja la asertividad:

Es importante practicar la asertividad tanto contigo como con los demás. Todos los profesionales coinciden en que ser asertivo con tu círculo de amigos, familia y pareja es bueno, pero lo que no se dice mucho es que es necesario ser asertivo también con uno mismo.

Hablarse bien, de manera clara, sin intentar ofenderse y respetando los diferentes estados de ánimos en los que podemos oscilar. Cuídate como cuidas el resto de personas a las que quieres.

Cuida tu autodiálogo:

La forma en la que nos hablamos y nos decimos las cosas, desde el tono hasta las palabras que usamos cuentan, hay que exigirse para poder avanzar, pero también mimarse y ofrecerse autocomprensión. Si a los demás le hablamos con cariño, por qué a ti no, si eres totalmente válido y posees tus capacidades igual que cualquier otra persona.

Perdónate y date otra oportunidad:

Ten muy presente que todos los seres humanos nos equivocamos, no solamente te ha pasado a ti. Si has cometido algún error irreparable, tómate tu tiempo para aceptarlo y poder procesarlo, pero llegado el momento, cuando te sientas preparado, siéntate contigo y perdónate. Nadie es perfecto, y tú tampoco.

Aprende a identificar los pensamientos:

Los pensamientos destructivos y negativos que suelen dominar a las personas con baja autoestima, es necesario cambiarlos por otros alternativos con un matiz más positivo, sustituyéndolos de forma constructiva generaran emociones más agradables.

No te compares con los demás:

Valorarse tal y como uno es, aceptando lo bueno y lo malo que todos poseemos, es un eslabón para dejar de compararte con otras personas. Cada uno de nosotros, cada uno de los seres humanos, es único e irrepetible, con unas características propias identificativas y tu como ser humano que eres, por tanto, eres único.

Establece metas realistas:

Marcarse objetivos y metas en la vida es gratificante y enriquecedor, pero es importante que estos proyectos sean realistas y se ajusten a la realidad y a las condiciones personales de cada persona. Traza paralelamente un plan factible para poder llegar a esas metas realistas.

El miedo al fracaso está muy marcado en las personas con baja autoestima, por eso es bueno que te plantees retos, pero siempre dentro de un contexto realista, y asumir que puede salir mal pero que, por otra parte, también puede salir bien y llegar a conseguirlo será muy gratificante en todos los sentidos.

Acepta las críticas:

Siempre habrá alguien que no estará de acuerdo con lo que haces o dices, en una utopía elegida por cada uno de nosotros, todos estarían de acuerdo con lo que yo digo y hago, pero eso es literalmente imposible. Las críticas constructivas son normales y hay que sacar el máximo partido de ellas, y lo normal es que no le gustemos a todo el mundo.

Si crees que puedes tener un problema de autoestima, ya sea por un problema puntual, o porque desde siempre hayas tenido esa sensación, puedes buscar ayuda psicológica y empezar a hacer que crezca para fortalecerla. ¡Contacta!

Ángeles Mérida Psicóloga

Licenciada en psicología por la Universidad de Málaga y amplia experiencia profesional. Especializada en terapia de parejas y otras áreas de psicología para adultos, niños y adolescentes. Número de colegiada AO10397.